Europa, siempre Europa

Mis días de vacaciones tocan a su fin y vuelvo a casa con la cabeza llena de ilusiones para el año que, desde mis épocas estudiantiles, sigue empezando en Septiembre. Lo haré, como viene siendo habitual en las últimas décadas, en Santander, en el encuentro de AMETIC donde volveremos a ponernos las tareas para el año crítico que nos va a tocar vivir.

Como ya es sabido por los que de alguna manera siguen este blog, en mis publicaciones periódicas trato de ceñirme a los temas de la Innovación, la Ciencia y la Tecnología que, afortunadamente cada día más, tiñen todos los ámbitos de nuestra vida avanzada. Este verano he tenido la oportunidad de recorrer algunos de los países que en fechas muy recientes se han unido a la Unión Europea y pisando sus montes y transitando por sus ciudades he podido apreciar lo grande, lo importante que es este proceso de INNOVACIÓN POLÍTICA trasformadora. En la EU perseguimos el reto de juntar a todo este amplio abanico de estados, naciones, tribus con sus lenguas diversas, en un proyecto común, incompleto, insatisfactorio muchas veces, pero al mismo tiempo oportuno para aportar ideas positivas, de progreso al resto de los actores del planeta.

Por ello, porque siempre lo he creído, vuelvo a España, convencido de que nuestro futuro está en el desarrollo de una Unión, donde la Innovación ocupe el papel central que se exige a quien quiere coliderar el mundo con los otros grandes actores. Para ello, el actual equipo que nos gobierna desde Bruselas ha lanzado, entre otros proyectos y en fechas bien recientes, la gran apuesta de la Agenda Europea de la Innovación que junto con otras grandes ideas tractoras nos han de llevar a ese destino mejorado que tanto deseamos.

España afortunadamente ocupa ahora una posición en este proyecto que se corresponde con nuestra potencia económica y por ello, tenemos mayores retos a resolver. El número de proyectos con raíz española aprobados en las entidades de I+D e Innovación en Europa crece en cada nueva convocatoria y la presencia de nuestras apuestas por el capital dedicado al DEEP TECH es afortunadamente más importante. Fruto de esta última decisión vamos a ser un partícipe protagonista en el lanzamiento de nuevo Fondo europeo con miles de millones de euros dedicados a hacer que nuestras startups no se vayan del continente buscando los siguientes tramos de capitalización necesarios para su crecimiento.

Estas ideas, un tanto deslavazadas como corresponde al final de una vacaciones, se irán concretando en los próximos meses y nos darán una buena idea de cómo no podemos perder de vista que nuestro futuro está ligado al resto de los ciudadanos del viejo continente. Un territorio donde seguir siendo garante de las tradiciones griegas, romanas, bizantinas, etc. no nos debe impedir sumarnos al carro de los nuevos senderos marcados por la Inteligencia Artificial, la Robótica, las tecnologías profundas. Debemos y podemos basar nuestra aportación en una aproximación estrecha entre las tecnologías y las humanidades, que saquen el máximo partido al binomio felicidad y progreso. Casi nadie en el planeta está en posición para poder hacer un planteamiento tan innovador. EUROPA SÍ.

Señoras, señores, el curso arranca y vamos a por las mejores notas.

Escribir comentario:

Este sitio esta protegido por reCAPTCHA y laPolítica de privacidady losTérminos del servicio de Googlese aplican.