BIDEN Y EL ESPERANZADOR PAPEL DE LA CIENCIA Y LA TECNOLOGÍA

El pasado domingo por la noche estaba leyendo un buen libro cuando, de repente, entró en mi correo uno de los muchos mensajes que nos invitan, tan a menudo, a interrumpir lo que estábamos haciendo. En esta ocasión mereció la pena. Un amigo fiable, de los que suelen tener buenas fuentes y mejores opiniones, me anunciaba que el Presidente electo de los EE. UU. de América había escrito una carta, larga de 3 folios, al Presidente del Broad Institute del M.I.T y Harvard.

Solté mi libro y me zambullí en la lectura, densa y minuciosa de la misiva. Y mereció la pena. Apoyándose en el precedente histórico del año 1944 cuando el Presidente Franklin D. Roosevelt escribió a su asesor científico preguntándole cómo la Ciencia y la Tecnología podrían ser aplicadas en beneficio de la salud, la prosperidad económica y la seguridad de la nación, el futuro Presidente Joseph Biden actualiza estas preguntas y lo hace a un destacado miembro de la élite científica de su país. En esas mismas fechas, el mismo, Eris S. Lander, ha sido nombrado asesor del Presidente y Director de la Oficina de Política Científica y Tecnológica, con un puesto en el Gabinete presidencial.

Y hace cinco preguntas que, para entrar en el tamaño de este artículo, restrinjo a su enunciado literal.

1. What can we learn from the pandemic about what is possible or what ought to be possible-to address the widest range of needs related to our public health?

2. How can breakthroughs in science and technology create powerful new solutions to address climate change propelling market-driven change, jump-starting economic growth, improving health, and growing jobs, especially in communities that have been left behind?

3. How can the United States ensure that it is the world leader in the technologies and industries of the future that will be critical to our economic prosperity and national security, especially in competition with China?

4. How can we guarantee that the fruits of science and technology are fully shared across America and among all Americans?

5. How can we ensure the long-term health of science and technology in our nation?

La preocupación que se descubre en el escrito sobre el papel que la Ciencia y la Tecnología deben jugar en el futuro de ese gran país, es para mí el eje fundamental de la relevancia de la carta, que por si misma, es de alto interés para todos los ciudadanos. Lo que serán muy importantes son las respuestas que, sin duda, vendrán desde ese templo del saber que se aloja en Boston. Tendremos que, una vez que nos felicitamos por la iniciativa, estar pendientes de qué se responde y más todavía, sobre cuáles y cómo se aplican en beneficio de la ciudadanía norteamericana, pero, también sin duda, en el del resto de la comunidad científica y tecnológica de nuestro mundo.

No entro en comparaciones, innecesarias, ni en discusiones, que pospongo, sobre los detalles de la extensa carta; hoy me quiero parar en el gesto, la señal inequívoca de la imprescindible cooperación entre las políticas públicas y el resto de las sociedades que quieren seguir siendo avanzadas en una competición global que no tiene ya fronteras.

Escribir comentario:

Este sitio esta protegido por reCAPTCHA y laPolítica de privacidady losTérminos del servicio de Googlese aplican.