ARRANCA EL CURSO CON ALGUNAS PROPUESTAS INTERESANTES
En la semana pasada, el Curso arrancó para mi con la participación en el Encuentro que desde hace ya muchos años tiene lugar en La Granda (Asturias) y en el que una vez más hemos puesto el foco en las políticas de Innovación. El Foro de Empresas Innovadoras ha tenido este año la responsabilidad de organizar el Curso y para ello ha reunido a un plantel de expertos de máximo nivel. Estando en Avilés, los que hemos tenido la suerte de escuchar lo que se ha contado, hemos podido disfrutar, y de ahí el título de este post, de llevarnos algunas sorpresas que deben alimentar nuestro intelecto durante los próximos meses.
Vaya por delante que la ponencia que nos ofreció Enric Banda, el actual Presidente del Consejo Asesor de Ciencia, Tecnología e Innovación del Ministerio de Ciencia e Innovación, fue excelente y llena de esos elementos que debemos tener muy en cuenta cuando pensamos en transformar la realidad en la que nos encontramos, no precisamente muy felices, hay que decirlo.
Bebiendo, entre otras, de esa presentación, algunas conclusiones. La primera es que la composición de los protagonistas del mundo de la innovación se ha transformado, de forma radical en los últimos años. La segunda es que algunas afirmaciones que hemos mantenido como verdades sobre nuestra situación en Europa también necesitan de ser revisadas. La tercera que nuestra única solución como país pasa por apostar por una Europa distinta, mucho más agresiva en el mundo de la innovación. Esta última, en verdad que no es una sorpresa, pero vaya por delante que cada vez es más rotunda, más imprescindible.
Empezando por la primera, una afirmación que sí que es una gran novedad: China ya ha adelantado a USA en los principales indicadores de I+D y particularmente en el ranking de las publicaciones científicas más citadas.
Esto unido a la declaración de su máximo líder en el reciente Congreso del Partido Comunista Chino con una frase como la que reproduzco: “… the country must regard science and technology as our primary productive force, talent as our primary resource and innovation as our primary driver of growth”, nos debe hacer entender como está cambiando el liderazgo en el mundo y como esto nos va a afectar en nuestros próximos retos a nivel global.
La segunda tiene que ver con una afirmación que habíamos hecho una definición: “en Europa hacemos buena Ciencia, pero no sabemos hacer buena Innovación”. Pues esa afirmación también parece que está puesta en cuestión si miramos algunos de los recientes resúmenes de las publicaciones científicas más citadas en el mundo.
En ella se puede ver como esa ciencia europea está siendo superada por países como Canadá o Australia además de los dos ya permanentes rivales, USA y China. Vemos, no obstante, como países dentro de nuestra Unión Europa sí que mantienen un esfuerzo relevante a la hora de crear la Ciencia que debe, no de forma única, pero si relevante, una innovación con capacidades de liderazgo mundial.
Y de aquí la tercera de las conclusiones. Ya en el post de la semana pasada me decantaba por una apuesta decidida por EUROPA. Es en el acierto de las políticas que se emanen desde Bruselas en donde radica la esperanza de poder competir en los mercados mundiales. Hay esperanza si vemos como países de nuestro entorno – Alemania, Reino Unido, los Nórdicos – ocupan posiciones de podio cuando se elaboran rankings de participación en las tecnologías disruptivas de los próximos años.
ARTIFICIAL INTELLIGENCE, COMPUTING AND COMMUNICATIONS
Coherente con esta firmeza, España, como uno de los países grandes de esta Unión, tenemos que hacer un esfuerzo creativo de gigantes si queremos participar y por ello influir en cómo va a ir el mundo en las próximas décadas. Vaya reto, vaya ilusión al estar en el paquebote que puede participar en esa competición.